Maricela Velázquez Sánchez y Carlos de la Rosa Segura ocuparán una curul en sendos Congresos. La dama en el ámbito federal, al haberse ubicado en el segundo sitio –entraron nueve- después de una muy intensa y difícil negociación con el Comité Ejecutivo Nacional. El hombre, una propuesta del Partido de la Revolución Democrática para buscar el voto en Cuernavaca; proceso del cual salió triunfador junto con otros 12 aspirantes de la izquierda en Morelos.
El regalo para Maricela es haber alcanzado una posición de privilegio en una lista que normalmente está reservada para quienes es necesario lleguen a la representación partidista, normalmente con alta influencia en sus respectivos institutos. Para ella es comprensible la crítica que se vierte sobre habérsele otorgado ese espacio, cuando hay muchos en una fila interminable, que tenían mayores méritos; sin embargo nos explica: “tengo el conocimiento, desde niña vivo en ese ambiente y he empujado en las filas juveniles del Partido Revolucionario Institucional”.
Para Carlos es una segunda oportunidad; ya había participado infructuosamente. Aunque no platicamos en nuestra entrevista sobre el particular, alcanzó una candidatura a diputado en Morelos a invitación del Partido de la Revolución Democrática, tras haber sido junto con José Luis Urióstegui Salgado, impulsores y promotores del juicio político en contra del entonces gobernador Sergio Estrada Cajigal Ramírez. Su triunfo fue parte de esta gran definición a favor de las izquierdas encabezadas por Graco Ramírez Garrido Abreu.
Maricela arranca con este cargo su presencia en la vida del servicio público; es a partir del próximo 1 de septiembre que su voto tendrá trascendencia nacional. Su voz será la de una autoridad y de una representante popular; aunque ha escuchado a su madre desde la tribuna local y estatal, desde la presidencia del PRI en Morelos y desde la candidatura al Gobierno del Estado, ahora será ella sola, su pensar y su capacidad, la que ha de conocerse.
Carlos es viejo lobo de mar; ha ganado un gran prestigio y la suficiencia económica en el litigio. Su participación en política es por gusto y convicción no por necesidad. Ha sido actor desde la trinchera de la sociedad y bastante crítico; le corresponderá ahora recibir las quejas, solicitudes, exigencias y críticas de la población, del periodismo, de sus votantes y de sus detractores. Se dice tolerante y preparado para la altísima responsabilidad de ocupar un sitio como diputado de la LII Legislatura en Morelos.
Para Maricela Velázquez el diputado debe permanecer con los perfiles actuales pero con grandes asesores que puedan orientar las ideas en posiciones jurídicas y convertirlas en leyes; para Carlos de la Rosa es necesario que el diputado por lo menos cuente con conocimientos profesionales, que facilitarían el conocimiento y precisión en el momento de legislar.
Pronto se renovarán los espacios en los aparatos legislativos; Maricela será una diputada priista de Morelos entre una mayoría de legisladores de izquierda y uno del Partido Acción Nacional (hijo del actual Gobernador) incipiente en estas lides. De la Rosa formará parte de una bancada importante de las izquierdas bajo el reto de generar unidad e imponer las bases jurídicas sobre las políticas.
Cada uno de ellos tiene sus ideas y sus planteamientos para trascender; ambos saben que tienen futuro y apostarán todo para la continuidad en el 2015.