Este lunes, el alcalde de Cuernavaca, Antonio Villalobos Adán, señaló que es bienvenida la auditoría especial al municipio que aprobaron diputados locales.
Sin embargo, refirió que heredó una deuda de mil 500 millones de pesos, más los pasivos, del Sistema de Agua Potable y Alcantarillado de Cuernavaca (SAPAC).
En conferencia de prensa, el presidente municipal dijo que pretenden responsabilizarlo del quebranto financiero que heredó de administraciones anteriores.
De igual modo, anotó que instruyó a sus trabajadores para que proporcionen toda la información que requiera la Fiscalía Anticorrupción, tras la denuncia que fue interpuesta en su contra.
Villalobos Adán externó que teme por su vida y la de su familia, porque le adjudican una riqueza que no tiene, y pidió a la gente que no se olvide del pasado porque "intentan hacerme responsable de lo que dejaron".
Mencionó que es bienvenida la auditoría especial que ordenó el Congreso del estado, al tiempo de indicar que les pidió que lo hicieran en respuesta a la sociedad y que no se olviden del pasado, además de que no hay dinero y lo que hay está etiquetado.
Finalmente, el edil informó que se vio en la necesidad de ampararse porque no se esconde y da la cara.