Procedimientos están suspendidos desde hace seis meses, señalan pacientes.

Pacientes del Hospital General de Cuernavaca "José G Parres" que padecen cáncer se manifestaron este martes para demandar que se cumpla con sus tratamientos de radioterapia, pues desde hace seis meses no los han recibido, con el argumento de que el equipo no funciona. 

Las inconformes señalaron que en esta enfermedad el tiempo es cuestión de vida o muerte y, por lo tanto, no pueden seguir esperando más, ante la postura de funcionarios de los Servicios de Salud de Morelos que argumentan que no hay presupuesto para reparar el aparato de radioterapias.  

 Indicaron que hay cuando menos 30 personas en lista de espera de seis meses, y las autoridades sólo les han dicho una y otra vez que tengan paciencia, hasta que se resuelva este problema, pero tampoco dan una fecha ni alternativas de solución para que la institución subrogue el servicio en otro lugar.  

Las mujeres que protestaron dieron a conocer que los pacientes afectados por el problema tienen diversos tipos de cáncer, pero la mayoría coinciden en que se les prescribió el tratamiento de radioterapia, ya sea antes de recurrir a cirugía o después. “Para nosotros es tiempo y el tiempo es oro y vida, no podemos esperar a que los funcionarios se pongan de acuerdo, porque ese recurso ya estaba etiquetado… solo nos dan largas, nos dicen que el aparato no sirve y que dejemos un teléfono y que ellos nos llaman”, aseguraron.  

Hicieron notar que para muchas de las presentes en la conferencia de prensa donde divulgaron su malestar está claro que contar con el tratamiento oportuno será la diferencia para que el cáncer “no crezca, no se extienda o se controle, y eso sucede en cualquier momento… estamos hablando de cáncer, no es una gripa”.  

Con lágrimas de desesperación, una de las pacientes narró que ya le extirparon un seno y acudió con su médico tratante, quien le explicó que de no contar con la radioterapia podría haber un retroceso: “no sirven de nada las quimioterapias, ni que me hayan cortado el seno, ni nada, porque si queda alguna célula cancerígena, puede seguir, y que les digan las quimios lo que duele… yo me saqué más estudios y tenemos un buen  servicio de los médicos, pero ellos nos dicen que se tiene que tener continuidad. Mi médico me dijo que me podría canalizar a la Ciudad de México pero van a tardar hasta cinco meses y ‘tú ya las necesitas’”.  

Pidieron que el gobierno estatal intervenga ante la omisión de los servidores públicos responsables de dicho nosocomio, ya que este tipo de servicios vitales deben tener el mantenimiento necesario, porque se cuenta con presupuesto aprobado para las radioterapias. Además, señalaron que las propias autoridades del sector deben tomar las decisiones necesarias, ya sea conseguir las radioterapias en otra institución de salud o enviar a los pacientes en un autobús a la Ciudad de México o contratarlo en otras instancias privadas, pues de lo contrario incurren en negligencia grave por omisión.