Lo anterior fue señalado por Jorge Juárez Morales, representante de la organización “Tata Wuelo”, quien estableció que “en las tarifas no se percibe una estructura de equidad, porque siendo las ciudades las que concentran mayor población, son quienes deben de hacer frente a un incremente mayor. Dicho de otra manera, los recorridos cortos, como en el caso de la ciudad de Cuautla, tienen un incremento del doble, con relación a los recorridos largos”.
Asimismo, estableció que “esto es particularmente más grave en la ciudad de Cuautla, donde por el actual diseño de los recorridos del transporte, un joven que vive en Casasano y estudia en el CBTIS 76 debe erogar 22 pesos diarios sólo en transporte”.
De igual forma, también ejemplificó: “Si un trabajador habita en la colonia Juan Morales y trabaja en la refresquera ubicada en Atlatlahucan, debe de gastar 24 pesos diarios.
“Las rutas en Cuautla siguen siendo las mismas desde hace 15 años y los desplazamientos de la población han cambiado notoriamente, sin que se hayan adecuado a esas necesidades”, observó.
“Nos preguntamos cómo se puede elevar el nivel de vida de las familias cuando el incremento a los salarios en los últimos cinco años no va mas allá del 15 por ciento y en cambio, la disminución del poder adquisitivo de los trabajadores tan sólo en este año ha sido mayor al 25 por ciento, incrementando con esto el nivel de pobreza en el estado de Morelos”, señaló.
Asimismo, cuestionó “cómo es posible elevar el nivel de vida, cuando tan sólo en transporte, una persona que trabaja y dos que estudian se deben de gastar más de la mitad de un salario mínimo y en nuestra ciudad más de la mitad de los trabajadores ganan dos salarios mínimos en promedio, según el INEGI”, finalizó.