Sin embargo, lo que sí hay, es personal de la empresa concesionaria que a diario cobra por las mas de 600 toneladas de desechos que el municipio de Cuernavaca viene a tirar a este lugar, por las 400 toneladas que deposita Cuautla, otras tantas de los municipios de la región oriente y por las 350 toneladas diarias que empezó a tirar el municipio de Jiutepec. Pese al incumplimiento, también la Comisión Estatal del Agua y Medio Ambiente (CEAMA) ha guardado silencio.
Entrevistado al respecto, uno de los regidores que más se opuso a la anarquía en ese tiradero, Silvestre Samano Ríos, de Desarrollo Agropecuario, confirmó que la empresa Domos se comprometió a cumplir con un plan de trabajo y a dar resultados en los primeros 30 y 60 días, lo cual no ha ocurrido. Asegura que se le ha solicitado por escrito ese plan de remediación, pero a la fecha no lo ha entregado a los regidores; aun más, los representantes de esa empresa no contestan las llamadas, aseguró.
El regidor señaló que existe preocupación entre los campesinos debido a que para la temporada de lluvias este tiradero producirá una grave contaminación al subsuelo y al río Cuautla, pues, por ahora, únicamente se construye una montaña de basura sin que existan las obras prometidas por Domos que incluyen el diseño, construcción y operación del relleno sanitario bajo la normatividad ambiental vigente, cercado perimetral, camino de acceso, oficinas administrativas y operativas, báscula, comedor, baños, caseta de vigilancia, control de acceso, cobertizo-taller, cisternas, señalización, área de emergencia, almacén de residuos peligrosos y la cubierta final, entre otras cosas.
La preocupación aumenta entre los ambientalistas debido a que el Ayuntamiento de Jiutepec dio a conocer, la semana pasada, que su basura también será tirada en Cuautla sin ninguna restricción ni oposición de los habitantes. Mediante un boletín de prensa Jiutepec informó que concesionó el depósito final de sus desechos por lo que resta de su administración a la empresa Recolección y Disposición de Desechos, S.A. de C.V. “De esta manera la empresa recibirá los desechos en el Relleno sanitario de la Zona Oriente de Morelos, en donde no habrá restricción horaria para que se depositen las 350 toneladas de basura que se generan en esta localidad”, apunta el comunicado.
El concejal señala que es paradójico que debido a la politización y resistencia de los habitantes de otros municipios como Cuernavaca y Jiutepec, que no quieren hacerse responsables de sus propios desechos, se esté contaminando la región con más alta productividad de hortalizas del estado de Morelos, pues a un costado del relleno sanitario se encuentran varias barrancas tributarias del río Cuautla, cuyas aguas permiten cultivar la mayor cantidad de hortalizas, caña de azúcar y arroz que se producen en la entidad.
Mientras tanto, el tiradero sigue recibiendo todo tipo de desechos, principalmente de Cuernavaca y Jiutepec, que son los principales beneficiarios y donde se produce la basura más peligrosa, por concentrar la mayor cantidad de hospitales, fábricas e industrias, sin que la CEAMA se pronuncie al respecto, pues al parecer ha dejado de supervisar el lugar tal como lo ofreció la última vez que clausuró el tiradero.