Después de manifestarse, comerciantes aceptan medidas.

El municipio suma 106 casos confirmados de covid-19, con 32 defunciones.

Tlayacapan.- Decenas de comerciantes del tianguis sabatino, así como del Jacalón, ubicado en el primer cuadro de este municipio, se manifestaron frente al edificio de La Cerería, donde funcionan las oficinas del Ayuntamiento, para protestar por la reubicación que el gobierno municipal pretendía llevar a cabo de las instalaciones de la Unidad Deportiva, donde los vendedores de productos esenciales podrían trabajar con las medidas sanitarias que exigen los protocolos del Semáforo de Riesgo Epidemiológico en rojo por la pandemia por covid-19.

Lo anterior despertó el malestar de los comerciantes, quienes desde un día antes perifonearon para movilizarse este martes.

Una vez reunidos en la explanada, exigieron dialogar con la presidenta municipal, Carmen Pochotitla, quien les pidió designar  una comisión por cada grupo de vendedores a fin de escuchar sus demandas.

Durante el diálogo, los inconformes se opusieron a la reubicación con el argumento de que en ese lugar no tendrían ventas, por estar alejado del centro.

A su vez, otros manifestaron su temor a perder sus lugares con motivo de las obras de mejoramiento urbano que llevará a cabo la Secretaría de Desarrollo Agrario, Territorial y Urbano (Sedatu).

Sin embargo, su postura cambió cuando se les informó que la reubicación obedecía a las restricciones sanitarias emitidas por las autoridades de Salud de los gobiernos federal y estatal, con motivo del regreso al color rojo del Semáforo de Riesgo Epidemiológico y que Tlayacapan suma ya 106 casos confirmados de covid-19, con 32 defunciones.

En ese punto, varios comerciantes presentes en la reunión manifestaron sus experiencias con la pandemia, al asegurar que habían perdido hasta cuatro miembros de su familia, mientras que otros narraron su calvario al padecer en carne propia dicha enfermedad.

Finalmente, los comerciantes del tianguis de los sábados tomaron la decisión de suspender durante dos semanas la vendimia para no seguir arriesgándose ellos mismos ni a la población.

La alcaldesa Carmen Pochotitla manifestó que los comerciantes tenían una versión distorsionada de la situación, pero mediante el diálogo se llegó a buenos acuerdos para todos.

“Cuando escuchan la versión y despejamos las dudas, lo entendieron muy bien; ellos están conscientes de que hay dos cosas que nos implican un cambio, una reubicación. La primera es la pandemia; estamos en semáforo rojo y por lo cual, estamos haciendo los esfuerzos para salvaguardar la salud de los tlayacapenses. En segunda, el tema de la reubicación por la inversión de 100 millones de pesos para la intervención de 14 espacios por parte de la Sedatu, que nos va a generar por algún tiempo una cuestión de molestia”, indicó.

La reunión concluyó con la firma de una minuta en la que se establece que el tianguis sabatino no será instalado durante dos semanas, por lo que el próximo 12 de enero se volverán a reunir con las autoridades municipales para analizar alternativas de reubicación, donde podrán realizar sus actividades con las medidas sanitarias necesarias de acuerdo con el estado del Semáforo Epidemiológico.