Lo anterior, de acuerdo con Graciela Velásquez Hernández, promotora de la formación de grupos de mujeres productivas, quien además estableció que “hemos detectado informes que establecen que los migrantes que llegan a Morelos, los jornaleros agrícolas, también son en una gran mayoría mujeres que se quedan ya en Morelos y los hombres siguen migrando, principalmente hacia entidades del norte o Estados Unidos”.
Velásquez Hernández refirió que los migrantes “llegan al corte del ejote en una temporada y luego emigra el hombre a Sinaloa, al corte del jitomate, y la mujer se queda aquí con los hijos; entonces las condiciones que la mujer tiene sola al frente del hogar también son muy problemáticas”.
Asimismo, consideró que “una gran cantidad de mujeres indígenas monolingües dentro de las indígenas migrantes, que no hablan el español y además, aunado a eso, la discriminación tan fuerte que tenemos hacia la población indígena en general, pero en especifico con las mujeres.
Graciela Velásquez señaló que es necesario “que además realmente empoderen a las mujeres indígenas dentro de los procesos comunitarios, que para eso hace falta muchísimo trabajo. Pero el trabajo mayor y los retos son aún mayores en la población migrante indígena aquí asentada”, finalizó.