Durante la conmemoración del segundo aniversario del Centro de Atención Primaria en Adicciones (CAPA) “Nueva Vida”, Jaime Dávila Sosa, secretario técnico de ese organismo, dijo que la entidad sigue registrando un alto consumo de bebidas alcohólicas entre la población de 12 a 65 años de edad, lo que provoca una situación de riesgo constante debido a que esto da lugar a accidentes automovilísticos, delitos diversos y a episodios de violencia familiar.

Destacó que en materia de adicciones, el alcoholismo es el problema más grave que enfrenta el estado de Morelos, pues “el 35.6 por ciento de los morelenses de 12 a 65 años presentan un patrón de alto consumo de alcohol, lo que coloca al estado en el primer lugar nacional. Son personas que no pueden detenerse antes de quinta copa cuando están bebiendo, terminan hasta la embriaguez; son responsables de accidentes de tránsito, de violencia familiar, de delitos, es un problema grave. Sabemos que el 50 por ciento de éstos están asociados al consumo de alcohol”, precisó.

El secretario técnico del Consejo Estatal contra las Adicciones dijo que dentro de las adicciones a las drogas legales, el tabaquismo también está causando estragos entre la población económicamente activa, pues “Morelos ocupa el séptimo lugar nacional con el 25 por ciento de los morelenses de 12 a 65 años de edad, que son fumadores activos actualmente”.

Agregó que la mitad de los estudiantes de nivel secundaria han probado el cigarro. “La gran mayoría lo han hecho en casa con los cigarros de sus padres; de ese 50 por ciento, el 25 son fumadores activos y sabemos que prácticamente todos los muchachos que fuman hoy en secundaria, van a desarrollar una adicción a la nicotina en los próximos años”, advirtió.

Asimismo, Dávila Sosa subrayó que los jóvenes fumadores de ahora “tardarán unos 20 años en promedio antes de intentar dejar de fumar por primera vez sin conseguirlo, y de 30 a 40 años antes de dejar de fumar definitivamente, pero con secuelas graves en su salud”.

En este sentido, aseguró que la labor preventiva de las seis Unidades de Especialidades Médicas (Uneme) que existen en el Morelos ha ocasionado un impacto positivo en la atención de los problemas de adicciones. Destacó que se han atendido a unos dos mil 400 jóvenes al año, con el propósito de interrumpir el consumo experimental entre ellos. “La misión de estas unidades es evitar que ellos sigan consumiendo y que desarrollen una adicción”, aseveró.

En el aniversario de la Uneme-CAPA participaron también representantes de la Jurisdicción Sanitaria número III y de la Central Mexicana de Alcohólicos Anónimos que sesionan en estas instalaciones.