Considerando que la temporada de calor inició la tercera semana de marzo y terminará hasta la tercera semana de octubre, es indispensable que la población adopte las medidas de precaución necesarias para proteger su salud, por lo que se les está haciendo llegar información básica y elemental para cuidar a su familia, informó Rubén Apáez Omaña, director de Protección Civil Municipal.
Alertó que de acuerdo con los pronósticos, se espera que en el mes de mayo la temperatura se incremente otros dos grados más, por lo que es necesario que las familias estén prevenidas para enfrentar temperaturas de hasta 39 grados. Recordó que el calor extremo puede originar el llamado “golpe de calor”, quemaduras y deshidratación, además de que descompone más rápidamente los alimentos y esto, a su vez, puede ocasionar enfermedades diarreicas.
Dijo que se están distribuyendo folletos informativos en todas las oficinas públicas en donde se recomienda no realizar actividades intensas o realizarlas muy temprano; aumentar la ingesta de agua aun cuando no se tenga sed; no exponerse mucho tiempo a los rayos del sol, pues recordó que las personas morenas sólo pueden estar un máximo de 18 minutos bajo el sol, mientras que las personas blancas únicamente 15 minutos.
También se recomienda no comer alimentos ricos en proteínas, como lácteos, carnes rojas, pescados y mariscos, debido a que incrementan la temperatura metabólica. Durante esta temporada se debe usar ropa ligera, de colores claros, con protección de la cabeza con gorra o sombrero, usar lentes obscuros y protector solar.
Apáez Omaña hizo énfasis en la costumbre que tienen algunas personas de consumir mucha cerveza para quitarse el calor, lo que no es recomendable debido a que las bebidas alcohólicas aceleran la deshidratación. Tampoco se debe consumir grandes cantidades de azúcar ni café y sobre todo, recomendó no dejar a los niños o las mascotas en el interior de los vehículos con las ventanas cerradas y bajo el sol, pues podría tener consecuencias fatales.
El funcionario también recomendó poner atención a los signos de insolación y “golpe de calor” para acudir a recibir atención médica de inmediato a fin evitar complicaciones. Asimismo, apuntó que la insolación se identifica por sudoración excesiva, palidez, calambres musculares, agotamiento, dolor de cabeza o mareos, agotamiento o vómito y desmayo, mientras que el “golpe de calor” se caracteriza por temperatura del cuerpo mayor a 39 grados, piel roja caliente y seca, dolor intenso de cabeza o mareos y pérdida de consciencia o desmayo. Ante tales síntomas, dijo, se debe pedir ayuda médica de inmediato.