Lo anterior pareciera dar sentido al comportamiento que tanto profesores, trabajadores y estudiantes asumieron durante los acontecimientos, pues se cerraron a dar todo tipo de declaraciones que incluso desesperó en un momento dado al Ministerio Público, según refieren testigos.
De acuerdo con el testimonio de la abuela del finado, éste no padecía ningún tipo de enfermedad y una maestra que se encontraba cerca refirió que el joven se sintió mal repentinamente y sólo le dieron los primeros auxilios antes de llamar a los servicios de emergencias.
El dictamen del Servicio Médico Forense que refiere que Carlos Javier Aguilar Ortiz murió a consecuencia de una asfixia por compresión al presentar lesiones y huellas de aplastamiento, abrió las puertas a las especulaciones, pues las condiciones en que perdió la vida pudieron haberse derivado al ser víctima del “bullying” o, como comúnmente se le conoce en las escuelas, de la famosa “bolita” por parte de sus compañeros.
Entrevistado al respecto, el subprocurador Juan Carlos Fontes Jordán señaló que será hasta que el Ministerio Público termine la investigación cuando se determine si se citará a comparecer a los maestros y los estudiantes, ya qye por ahora no se puede establecer la situación real del deceso.