Tocan las campanas para exigir solución a diversas demandas.

Cuautla.- La mañana del jueves, habitantes de este municipio indígena se movilizaron y tocaron las campanas de la iglesia para convocar a los sus vecinos a tomar las instalaciones de la presidencia municipal, en protesta por las presuntas irregularidades en las que ha incurrido la administración de la vocera del Concejo Municipal Indígena, Guillermina Maya Rendón, quien es candidata a una diputación local.

Los inconformes dijeron estar cansados de las imposiciones que lleva a cabo, amparada en supuestos usos y costumbres, para beneficiar a personas allegadas a su grupo político, al grado de que ha llegado a iniciar denuncias penales contra quien no está de acuerdo con sus decisiones.

Aseguran que son múltiples las irregularidades en las que está incurriendo la vocera, pero lo que derramó el vaso fueron las demandas penales que inició en contra de los ciudadanos que quitaron unos puestos que Maya Rendón colocó en la vía pública.

Señalan que, con base en supuestos usos y costumbres, mandó a colocar casitas de madera para la venta de artesanías frente al Centro de Salud y una escuela, donde entorpecían el paso de los vehículos y de los peatones, además de que es parte de la Ruta de Evacuación del Volcán Popocatépetl.

Por esa razón le entregaron escritos pidiéndole la reubicación de los puestos semifijos, pero se negó. Por ello, varios ciudadanos procedieron a quitarlas a fin de evitar riesgos para los estudiantes y las personas que acuden al Centro de Salud, lo que motivó que fueran denunciados penalmente.

Señalan que otro caso que consideran un abuso es la destrucción de las canchas del paraje “Tlalocan”, donde inició la destrucción de las canchas de usos múltiples, en las que los campeones de voleibol entrenan, porque pretende construir una sola cancha de futbol, dejando sin espacios deportivos a la comunidad.

También está el caso de un policía municipal, quien fue retenido por habitantes del poblado de Tepango después de que presuntamente golpeó a un joven de esa localidad, por el que se tuvo que pagar una multa de 350 mil pesos debido a que la autoridad se negaba a acudir para arreglar el problema de abuso de autoridad.

Entrada la noche de este jueves, las negociaciones continuaban con integrantes del Concejo Municipal Indígena. Se informó que sólo se tenía el acuerdo de que el Concejo Indígena se hará cargo del pago de las artesanías que resultaron dañadas y que ascienden a un monto de casi 29 mil pesos y que las demandas serían retiradas.

Otra de las exigencias es que Guillermina Maya Rendón termine primero su gestión como titular del Concejo Municipal Indígena y después se vaya a cualquier cargo al que aspire.

En la zona de las protestas hubo presencia policial.