De acuerdo con Mario González Trejo, vecino de esta demarcación, “fue desde el año de 1999 cuando la Dirección Municipal de Protección Civil, a cargo de Rubén Apáez Omaña, determinó como zona de alto riesgo al espacio, al lado del cual se encuentran al menos 250 viviendas”.
Explicó que a raíz de ello, “se han hecho diversos trámites ante diversas administraciones municipales posteriores e incluso la actual, sin embargo, no se ha tenido una respuesta favorable”.
Y es que, dijo, “de afectados, ahora nos clasifican como peticionarios, a pesar de que no somos gente que haya invadido los espacios, sino que las familias que estamos asentadas en este lugar, en su momento, compramos nuestros terrenos”, apuntó.
De igual manera, González Trejo apuntó que “cuando se presentan 45 minutos de lluvia intensa, el agua llega a nuestras casas y alcanza hasta metro y medio de altura, de ahí el temor fundado de que pudiera ocurrir una tragedia, en caso de que la lluvia llegue a alargarse aún por más tiempo y por consecuencia toma fuerza y altura”.
Ante estas circunstancias, observó: “Hemos decidido solicitar el apoyo de las autoridades estatales, ello con la intención de que se nos brinde el apoyo para encontrar una solución que corrija este problema”, finalizó.