Ante el riesgo de contingencia ambiental por no contar con un lugar propio para confinar su basura, el municipio de Cuernavaca volvió a trasladar su problema a Cuautla, donde a partir de este fin semana se empezaron a recibir 250 toneladas diarias de basura, clon lo que la vida útil del relleno sanitario se reduce drásticamente.
Fuentes allegadas al Relleno Sanitario “La Perseverancia” de Cuautla dieron a conocer que este lugar cuenta con la capacidad para recibir los desechos, a pesar de que las tres primeras celdas prácticamente están cerradas por haber llegado a su límite. Por ahora se trabaja en la construcción de una quinta celda y una nueva laguna de lixiviados para enfrentar la demanda.
Con la llegada de más de 250 toneladas de basura al relleno sanitario, los habitantes de las colonias aledañas al lugar han puesto “el grito en el cielo” y se organizan para exigir una explicación a las autoridades municipales, pues aseguran que a la fecha no les ha sido resuelto el problema de contaminación que genera el basurero.
Los afectados han solicitado el apoyo de organizaciones ambientalistas, pues aseguran que la amenaza en contra de sus comunidades será mayor, debido a que la empresa a cargo del relleno sanitario ha empezado a comprar más terreno para ampliarlo, lo que complicará el problema ambiental que prevalece.