Técnicos de la Conagua verifican los principales manantiales y pozos que surten de agua a las comunidades de municipios como Tetela del Volcán, Ocuituco, Zacualpan, Temoac y Yecapixtla para conocer si la actividad volcánica la está afectando. Hasta ahora, los resultados han reflejado que el líquido se encuentra dentro de la norma.
El director del OCB de la Conagua, Juan Carlos Valencia Vargas, señaló que las muestras de agua fueron analizadas en el laboratorio de este organismo, determinando que no existe ningún riesgo para la población que se abastece de agua de estas fuentes, pues hasta ahora cumplen con lo estipulado por la norma NOM-127-SSA1-1994 y los Criterios Ecológicos (CECA-1999).
Las muestras para el análisis fueron tomadas de los manantiales La Escalera-El Salto, Las Minas-El Salto, Aguayoca-Hueyapan, Xantamalco, ubicados en Tetela del Volcán; El Venado, en Zacualpan de Amilpas, y el Manantial San Miguel 2 de Ocuituco; asimismo, en los pozos Temoac 2, Huazulco en Temoac y Potrero Tlacotepec, en Zacualpan.
En todos estos lugares se verificaron parámetros como la posible variación en la temperatura del agua; se realizaron análisis fisicoquímicos para determinar la presencia de elementos como flúor, boro y sulfatos, considerados como indicadores de la posible influencia de la actividad volcánica.
Valencia Vargas indicó que también fueron verificados otros parámetros de la Norma Oficial Mexicana NOM-127-SSA1-1994: “Salud ambiental, agua para uso y consumo humano-límites permisibles de calidad y tratamientos a que debe someterse el agua para su potabilización”. En el caso del boro, éste fue comparado con los “Criterios Ecológicos de la Calidad del Agua para fuentes de abastecimiento de agua potable” (CECA-1999).
El monitoreo se realizó en el medio natural, previo a los procesos de desinfección que deben realizarse para distribuirla a la población, por lo que en el caso de los manantiales de Tetela y Hueyapan, fueron detectados coliformes fecales, “presumiblemente derivado de la presencia de ganado. Sin embargo, mediante el proceso de cloración, el agua puede consumirse sin riesgo”, señaló.
Para garantizar que el agua que consumen los habitantes de las zonas cercanas al volcán es de buena calidad, dichos monitoreos se llevarán a cabo cada 15 días, durante el tiempo que el Popocatépetl se mantenga con actividad elevada.