Al concluir los festejos por el 79 aniversario de la fundación de esta organización, Juan “B”, delegado a la “Conferencia mexicana del área Morelos II”, con presencia en los 16 municipios de la región oriente, destacó la importancia de que los profesionales de la medicina, la psicología, entre otros, se sumen a la cruzada para evitar los estragos provocados por la adicción a las bebidas alcohólicas.
Destacó que en los Estados Unidos de Norteamérica el 30 por ciento de las personas que tienen problemas con el consumo del alcohol, llegan a la agrupación a través de un profesional, en tanto que en nuestro país, sólo es el dos por ciento.
Es por ello que hizo un llamado para que los profesionales se sumen a esta cruzada, “en el año del mensaje a los profesionales, queremos insistir en que son unos grandes aliados para traer a las personas que pueden estar sufriendo los estragos del alcoholismo”.
El representante de AA destacó que en la región oriente esta organización cuenta con 172 grupos de apoyo, que atiende a alrededor de mil 200 personas mediante estrategias internacionales. Al mismo tiempo, deslindó a la asociación de los denominados anexos, “no tenemos nada que ver con los anexos y las granjas, que no nos confundan, son compañeros que se han desviado, donde los encierran y los maltratan, eso no es Alcohólicos Anónimos”.
Dijo que esta organización tiene presencia en algunas escuelas, hospitales, en las cárceles distritales de Cuautla y Jonacatepec, así como en el ingenio de Casasano; sin embargo, es necesario incidir más en el nivel de secundaria, donde se está registrando un incremento alarmante de casos de adicción al alcohol.
En su asamblea de aniversario, AA expuso como un caso de éxito la experiencia del grupo especial de la comunidad de Huazulco, en el municipio de Temoac, donde se atienden a adolescentes de 13 a 15 años de edad, quienes presentaban serios problemas de alcoholismo y que su ayuda ha logrado superar la adicción y continúan con sus estudios.
Destacó que el problema de alcoholismo se registra en todos los municipios de Morelos, porque es en los carnavales populares donde los jóvenes abusan en el consumo de alcohol, el cual es presentado como una cuestión cultural sin ninguna estrategia de prevención de adicciones.