El presidente del “Grupo Hacienda”, Ángel Rico, dijo que “por más de cinco años hemos estado en poder del casco de la hacienda, luego de que la empresa incumplió con las indemnizaciones por la contaminación con plomo”.
“Se debió de remover la tierra a dos metros de profundidad y a cinco kilómetros a la redonda, pero no se hizo nada y a las familias de quienes perdieron la vida a causa del plomo, hasta las fecha no se les ha hecho llegar el apoyo acordado”, dijo.
De esta manera, “tenemos el temor de que haya un desolado del espacio de seis mil quinientos metros cuadrados, que durante 18 años se utilizó para la fabricación de pinturas”.
Los habitantes se reunieron en torno a la ex hacienda y “con la intención de tocar las campanas del pueblo y llamar a otros campesinos para que nos apoyen, porque si bien no sabemos a quién pertenece en la actualidad, el espacio se quedó en prenda a cambio del cumplimiento de los acuerdos para indemnizar a los habitantes y limpiar la zona afectada por el plomo”.
Presente en el lugar, el presidente del “Barzón Morelos”, David Padilla Marín, hizo un llamado a las autoridades, con la intención de que intervengan “y se evite que el conflicto crezca, pues la situación podría empeorar, ante la amenaza que existe sobre los pobladores”.