“De hecho, la Comisión para la Protección Contra los Riesgos Sanitarios del Estado de Morelos (Coprisem), es la encargada de aplicar sanciones a los sistemas que no cumplan con norma, acción en la que se trabaja de forma coordinada”, aseguró el director de Salud municipal, Gonzalo Sánchez.
Dijo que “a través del trabajo conjunto en la verificación de cloración de agua en los sistemas independientes y en el mismo Sistema Operador de Agua Potable, es como se garantiza el porcentaje de cloración”.
Señaló que “en colonias como Casasano y Tetelcingo, se tiene arraigada la idea de que el agua clorada representa algún problema para salud, lo cual no es cierto”.
Dijo que el nivel de cloro “debe de ubicarse en 0.2 a 0.5, de acuerdo a la cantidad de agua, para no afectar la salud al consumirla”.
Comentó que “las enfermedades gastrointestinales siguen siendo un problema de salud pública, que afecta a un gran número de personas de todas las edades, principalmente a causa de consumir agua contaminada”.
Es por ello que “las acciones para disminuir el número de personas con esta enfermedad, siguen estando vigentes, mismas que son realizadas por Coprisem, a través de una campaña intensa de verificación de cloración de agua en los Sistema Independientes y en el mismo Sistema Operador de Agua Potable”.
“Sostuvo que esta agua al estar clorada es apta para consumo humano, no obstante llamó a la población a que extremen aún más las precauciones, hirviendo el agua, así se reducirá en un porcentaje mayor el riesgo de contraer una enfermedad”.