Sin embargo, para lograr el objetivo de lograr el autocuidado de la salud en las mujeres, las autoridades sanitarias deberán emprender una campaña simultánea para superar varios obstáculos que atentan contra la salud sexual de las mujeres, como es el machismo.
La jefa de la JS-III, Ángela Patricia Mora González, destacó que aunque los índices de cáncer cérvico-uterino no es grave en los municipios de la región oriente del estado, es importante prevenir su aparición, sobre todo en las mujeres en edad reproductiva. Apuntó que la prueba de VPH es rápida, sin dolor y sin efectos colaterales para las mujeres.
Hizo énfasis en el hecho de que el tener un resultado positivo a la prueba de VHP no significa que la mujer portadora tenga ya el cáncer o que sea resultado de una actividad sexual con diferentes parejas, pues el virus puede estar latente en el organismo antes de hacerse presente.
Destacó la importancia que tiene el que las mujeres de entre 35 y 64 años de edad se realicen esta prueba, puesto que la Organización Mundial de la Salud reportó en el año 2001 que alrededor de 630 millones de personas estaban infectadas con el VPH, mientras que en 2002 la Agencia Internacional para la Investigación del Cáncer (IARC) presentó registros de 12 mil 516 nuevos casos y cinco mil 777 muertes por este padecimiento en México.
La funcionaria señaló que la Jurisdicción Sanitaria III hasta ahora ha realizado más de 45 mil exámenes de VPH, por lo que aún falta mucho para alcanzar la meta de 67 mil mujeres que deberán practicarse esta prueba que les garantizará una mejor calidad de vida al prevenir el cáncer cérvico-uterino.