Así lo denunciaron comerciantes y vecinos del primer cuadro de la ciudad, quienes se sumaron a reclamos de los integrantes de la marcha del silencio realizada el sábado pasado, donde se denunció que la apatía del Ayuntamiento está dejando en indefensión a los habitantes.
En el municipio de Ayala han disminuido patrullajes de la Policía, lo que sumado a la falta de alumbrado público, ha provocado aumento en los índices delictivos, denunció Lucrecia Morales, quien señaló que estos señalamientos se le hicieron al Ayuntamiento durante la pasada marcha por la paz.
Aún y cuando el presidente municipal Bernardo Sosa Martínez recibió las peticiones, a la fecha no ha dado respuesta, por lo que los problemas siguen y por las noches la cabecera municipal continua en penumbra, al no haber alumbrado público.
Al tratar de obtener una postura al respecto, el presidente municipal prácticamente se encerró en su oficina y se negó a recibir a los medios de comunicación, argumentando que tenía mucho trabajo.