Lo anterior, después de que por la mañana se realizara una mesa de diálogo en el Congreso del estado con la participación del subsecretario del Gobierno, Ricardo Robledo Chávez, miembros del cabildo, un grupo de ejidatarios inconformes y directivos de la Comisión Federal de Electricidad (CFE) encabezados por Julio Díaz Vargas, director de proyectos, en donde se tomaron acuerdos que no fueron aceptados por los inconformes.
Poco después de las 18 horas, el presidente municipal Bernardo Sosa Martínez y su cabildo se presentaron al Palacio Municipal, en donde los campesinos pusieron como condición para entregar las instalaciones municipales, la cancelación de la licencia de construcción.
En ese momento se convocó a una sesión extraordinaria de cabildo, donde se aprobó suspender definitivamente los efectos legales de la ampliación de licencia de construcción del acueducto.
Pasadas las 11 de la noche, a petición de los inconformes, se corrigieron los términos del acuerdo y se recabaron las firmas de los integrantes del cabildo, con lo que se dio por finalizada la toma de la presidencia municipal.