Al hablar sobre el panorama que prevalece en la entidad, comentó que algunos municipios están cerrando muy bien, pero no en todos. “Han tomado las precauciones y las previsiones necesarias, mientras otros gobiernos están pasando por serios problemas financieros para el pago de aguinaldos, salarios o de liquidaciones a la base trabajadora”.
Por ello, Quiroz Medina comentó que se ha hablado con cada uno de ellos y “se está revisando cada elemento con los presidentes municipales salientes y particularmente con los entrantes, en el ánimo de poder lograr las condiciones de paz social que permitan procesos de transición de manera ordenada”.
Reconoció que en su gran mayoría, los presidentes municipales que entren en funciones el primero de enero tendrán retos difíciles, debido a la problemática financiera.
“Las finanzas fracturadas de muchos municipios es un tema que no se va a poder resolver solamente en tres años; van a requerir muchos años más y desde luego que estaremos trabajando muy de cerca con ellos”, apuntó.
Sobre la situación particular de Totolapan, donde un grupo de trabajadores tomó la presidencia municipal, el encargado de la política interna de Morelos observó que debido a la falta de previsión “se presentó la manifestación y estamos trabajando muy de cerca con el alcalde saliente y la entrante, para establecer una ruta en común que permita transitar ordenadamente en los relevos”.