Pese a las expectativas de abogados y ciudadanos, por conocer la forma de trabajar del nuevo fiscal, la toma de posesión se dio con mucho sigilo y se informó que no habrá acceso para los medios de comunicación a la información sobre los asuntos derivados con la dependencia.
La ley mordaza, implementada desde hace varios meses, ha propiciado que numerosas organizaciones civiles y activistas se hayan unido, para exigir mayor responsabilidad de parte de la Fiscalía General del Estado para investigar las inhumaciones clandestinas en el panteón irregular de Tetelcingo.
El caso de Oliver Wenceslao Navarrete Hernández, cuyo cuerpo fuera depositado en una de esas fosas irregulares de Tetelcingo, puso al descubierto toda la anarquía que impera en esta dependencia, en donde a la fecha no se cuenta con los reactivos completos para la realización de pruebas de ADN, ni existen los protocolos que marca la ley para llevar a cabo las investigaciones y la identificación de los cuerpos ahí sepultados.