Desde las ocho de la mañana, el grupo de vecinos se apostó a mitad del camino de acceso al basurero de Cuautla, colocando una camioneta atravesada para impedir el ingreso de más toneladas de basura de la capital del estado. Reclamaron que el ayuntamiento esté permitiendo que el problema sanitario por los desechos de Cuernavaca se esté trayendo a Cuautla, donde está contaminando el suelo, el agua y el aire.
El bloqueo provocó que se formara una larga fila de camiones cargados de basura a lo largo del camino de acceso. Los vecinos de las colonias Ampliación Sur Galeana y La Pedregosa señalaron que a partir de que se autorizó la entrada de camiones con basura de Cuernavaca, se incrementaron los olores fétidos y la fauna nociva, lo que ha empezado a afectar más su salud.
Virginia Santamaría, dirigente de los pepenadores del denominado relleno sanitario, asegura que no hay lugar donde tirar la basura de Cuernavaca, lo que está ocasionando que la contaminación ambiental se agudice. Asegura que al reclamarle al director de Servicios Públicos, Francisco Javier Escutia, la autorización de la entrada de camiones de Cuernavaca, éste informó que sólo son 80 carros al día. “No nos vamos a quitar de aquí hasta que venga el presidente municipal; el bloqueo se hizo por 30 ó 40 carros de basura que están metiendo del diario de Cuernavaca. Por voz propia de Francisco Javier Escutia dice que son 80 carros diarios. Nada más imagínese dónde van a dar esos 84 carros de basura; imagínense cómo está el basurero… ¡Está súper saturado!”, indicó.
La lideresa de los pepenadores asegura que sus agremiados están en peligro debido a que la basura de Cuernavaca se tira con desechos altamente contaminantes; “la basura de Cuernavaca trae residuos sólidos infecciosos, los RPBI que totalmente es un crimen al arrojar esos desechos a la basura. La salud es lo que aqueja a las personas, hay muchas enfermedades de piel, de bronquios por la contaminación”.
Los inconformes piden la destitución de varios funcionarios, entre ellos del director de Servicios Públicos Municipales. Al cierre de esta edición, el plantón continuaba y la fila de camiones con basura aumentaba, a la espera de poder ingresar al tiradero. Mientras tanto, los integrantes del cabildo municipal mantenían una reunión a puerta cerrada para tratar de encontrar una solución al problema y dar una respuesta a los manifestantes.