Asimismo, estableció que “hay una generación perdida: hemos visto a niños con los que hace 10 años comenzamos a trabajar; veíamos muchas expectativas, futuros profesionistas, jugadores de futbol, gente trabajadora, pero que el día de hoy ya terminó su ciclo educativo y están trabajando –los que así lo hacen– en actividades muy distintas a las que habían pensado; incluso hay varias chicas que han tenido un embarazo adolescente”.
El entrevistado, que se ha destacado anteriormente como representante de la Fundación de Apoyo Infantil y de la Organización Alternativa Joven, sostuvo: “Yo creo que la expectativa que teníamos hace 20 años, cuando empezamos a trabajar en un alto porcentaje, no se concretó. Hoy vemos que muchas chicas y chicos vieron clausuradas sus posibilidades de desarrollo y no tenemos las bases para esperar que en los próximos 10 a 15 años tengamos una juventud más preparada y que viva con la esperanza de tener una buena educación, un buen matrimonio”.
Asimismo, agregó que “es espeluznante el hecho de que hay mucha violencia intrafamiliar, muchas veces producto de estas relaciones económicas que no se ven cubiertas; muchas veces hay gente que no tiene qué comer”.
Recordó que el 17 de diciembre de 1999, la Asamblea General de las Naciones Unidas adoptó la recomendación hecha por la Conferencia Mundial de Ministros de Asuntos de la Juventud, declarando el 12 de agosto el Día Internacional de la Juventud. Esta conmemoración se realizó por primera vez en el año 2000, “por lo que es momento de hacer un reflexión con relación a las condiciones de vida de los jóvenes mexicanos y especialmente los de nuestra región”
Y añadió que “nuestra asociación trabaja a partir de proyectos socioculturales que promueven valores, pero también relaciones de equidad entre géneros y también con profundo respeto a lo que es la diversidad sexual y lo que es el respeto a los derechos económicos, sociales y culturales”.
Nosotros, agregó, vemos como consejo, la necesidad de impulsar una nueva política de drogas; es decir, estamos viendo los esfuerzos que hace el gobierno federal, pero sentimos que no es por ahí por donde va a haber una solución al desarrollo del municipio, estado e incluso del país, porque hemos visto en experiencias de otros países que ha sido a través de la regularización de las drogas como se han podido reducir los daños que causa todo este fenómeno de violencia. Principalmente nos interesa apostarle al desarrollo”.
Para finalizar, Castillo Gerardo refirió que “hemos visto que en países como Alemania y Holanda, la política es hacia el desarrollo social; entonces es invertirle más a la educación, a la cultura, a la generación de empleos y capacitación, para que sobre estas bases se puedan constituir nuevas identidades personales que a los jóvenes se les dé esperanza de poder progresar, tener oportunidades de aprender, pero también tener un ingreso que los aleje de alternativas que son ciclos de muerte”.