Alemania pondrá en marcha un plan de desconfinamiento progresivo y condicional por la epidemia de COVID-19 a partir del lunes, que contempla la eventual apertura de lugares culturales, anunció el miércoles Angela Merkel.
Los comercios no esenciales, museos, zoos, jardines botánicos y sitios conmemorativos podrán reabrir en las próximas semanas si la incidencia se mantiene por debajo de los 100 casos por 100,000 habitantes durante una semana, dijo la canciller, quien aseguró que con este plan en cinco etapas, el país entra en “una nueva fase”.
Merkel acepta así aliviar las medidas draconianas de confinamiento, cediendo a un creciente descontento de la opinión pública y en el seno de su propio gobierno a siete meses de las elecciones legislativas.
Tras más de nueve horas de duras negociaciones, la canciller y los dirigentes de los 16 Estados-regiones del país llegaron a un acuerdo sobre un calendario para flexibilizar las medidas de confinamiento parcial en vigor desde finales del año pasado.
Solo un tercio de los alemanes apoya el dispositivo anticovid, frente a dos tercios a principios de enero, según un sondeo de YouGov publicado esta semana.
“Hoy podemos hablar de esperanza”, dijo en una conferencia de prensa la canciller que estimó que su país entra ahora en “una nueva fase” de la lucha contra la epidemia posible gracias a la aceleración de la vacunación.