Empleados de una fábrica en Baltimore, Estados Unidos, que fabrican vacunas contra el coronavirus combinaron ingredientes de la dosis de manera accidental y arruinaron alrededor de 15 millones de biológicos de Johnson & Johnson, retrasando la producción de la planta, informó The New York Times.

El problema surgió porque en esa planta reclutada por el gobierno para producir las vacunas Johnson & Johnson y AstraZeneca, dirigida por Emergent BioSolutions, socio comercial de ambas farmacéuticas, usan la misma tecnología para la vacuna, usando una versión inofensiva del virus, conocido como vector que se transmite a las células para producir una proteína que estimula el sistema inmunológico para producir anticuerpos.

Los vectores de Johnson & Johnson y AstraZeneca son biológicamente distintos y no se pueden intercambiar, pero en febrero pasado, algunos trabajadores confundieron ambos biológicos durante el proceso de producción, lo cual generó dudas, por lo que Emergent BioSolutions ya tomó medidas para fortalecer el control sobre el trabajo y evitar más fallas de calidad, indicó el diario estadunidense.

Destacó que la Administración de Alimentos y Medicamentos (FDA por sus siglas en inglés) investiga el caso, mientras los funcionarios federales ya lo asumen como un error humano.

“El error es una gran vergüenza tanto para Johnson & Jonhson, cuya vacuna de una dosis se ha acreditado para la aceleración del programa nacional e inmunización, como para Emergent, su subcontratista, que ha enfrentado duras críticas por su fuerte cabildeo a favor de los contratos federales, especialmente para arsenal de salud de emergencia del gobierno”, indicó.

Esta errata se descubrió hasta que estaban en control de calidad de Johnson & Johnson, pero ya se habían contaminado 15 millones de dosis. Ninguna salió de la planta y el lote se puso en cuarentena.

Sin embargo, aclaró que la equivocación no afecta las dosis de Johnson & Jonhson que actualmente se administran y utilizan en el país. Todas esas sustancias se produjeron en los Países Bajos, donde las operaciones han sido totalmente aprobadas por los reguladores federales.

No obstante, supuso que el resto de los envíos de la vacuna Johnson & Jonhson que se proyectaban en 24 millones de dosis para abril, provendrían de la planta de Baltimore. Estos envíos están en duda mientras se resuelven los problemas con el control de calidad, señaló, citando a personas familiarizadas con el caso.

Los funcionarios federales esperan tener dosis suficientes de Johnson & Jonhson y los demás fabricantes para cumplir con el compromiso del presidente Joe Biden de proporcionar las suficientes dosis para inmunizar a todos los adultos mayores para finales de mayo.

Pfizer ha enviado sus dosis antes de lo programado y Moderna está a punto de obtener la aprobación para entregar la vacuna en paquetes de hasta 15 dosis en lugar de diez.

Hasta este 31 de marzo, Estados Unidos ha suministrado 147.6 millones de dosis, según Our World in Data.