Las labores para retirar los vagones de las vías del tren accidentado en Taiwán se prolongarán siete días, después del accidente que dejó al menos 51 muertos y 144 heridos de diversa consideración.
La operadora ferroviaria taiwanesa aseguró que serían necesarios siete días para sacar los vagones accidentados, reparar el tramo en el que tuvo lugar el descarrilamiento del Taroko Express por la colisión con un vehículo de mantenimiento mal estacionado y restablecer el servicio.
El Gobierno de Taiwán decidió que, desde hoy y durante tres días, las banderas ondearán a media asta en señal de duelo por las víctimas. La fuente informó también de que, de los 144 heridos, 69 continúan recibiendo tratamiento médico en seis hospitales distintos de la isla.
Entre el medio centenar de muertos se encontraban el maquinista y un ciudadano de nacionalidad francesa. El accidente, que se produjo este viernes a las 09: 28 hora local, es el peor de los acontecidos en el país en las últimas cuatro décadas, según la prensa local.
El tren estaba entrando en el túnel de Daqingshui en dirección sur con casi medio millar de pasajeros a bordo cuando descarriló a consecuencia de la colisión con un vehículo de mantenimiento ferroviario que, al no tener correctamente echado el freno de mano, resbaló por la pendiente en la que estaba estacionado y cayó sobre las vías.
Un tribunal de Taiwán liberó el sábado bajo fianza al gerente de un sitio de construcción cuyo camión, según las autoridades, causó un accidente de tren que mató al menos a 51 personas, mientras familiares lloraban los muertos en el lugar del accidente.
El tren, con casi 500 personas a bordo, viajaba desde Taipei, la capital, a Taitung en la costa este cuando descarriló en un túnel al norte de la ciudad de Hualien. Cuarenta y una personas se encuentran hospitalizadas, de las 188 heridas reportadas.
Los fiscales habían solicitado a un tribunal que detuviera al gerente acusado de causar la muerte por negligencia, dijo el sábado un funcionario del Ministerio de Justicia a los periodistas.
Pero un tribunal de Hualien liberó al gerente, Lee Yi-hsiang, con una fianza de 500 mil dólares de Singapur, aunque le impidió salir de Taiwán durante ocho meses y dijo que tenía que quedarse en Hualien.
El tribunal dijo que si bien la caída del camión en el camino del tren posiblemente se debió a negligencia, no había “posibilidad de conspiración”.