Los líderes del G7 se comprometerán a distribuir mil millones de dosis de vacunas contra COVID-19 a los países pobres, con el objetivo de “poner fin a la pandemia” en 2022, anunció el jueves el gobierno británico.
Reunidos del viernes al domingo en el suroeste de Inglaterra, “los líderes mundiales deben anunciar que proporcionarán al menos mil millones de dosis de vacunas contra el coronavirus, compartiéndolas y financiándolas”, afirmó el Reino Unido, que tiene la presidencia rotatoria del grupo.
“También deben “establecer un plan para ampliar la producción de vacunas para cumplir este objetivo”, agregó.
“Al vacunar a más personas en todo el mundo, no sólo ayudaremos a detener la pandemia de COVID-19, sino que también reduciremos el riesgo para los habitantes del Reino Unido al reducir la amenaza que suponen las variantes resistentes a las vacunas que aparecen en zonas con brotes importantes”. Añadió.
Por su parte, Londres donará 100 millones de dosis sobrantes de varios laboratorios gracias al avance de su programa de vacunación, que ya ha aplicado casi 70 millones de inyecciones.
Se suministrarán cinco millones de dosis antes de septiembre y el resto hasta 2022, principalmente mediante el programa internacional Covax.
Estados Unidos ya se ha comprometido a proporcionar 500 millones de vacunas de Pfizer/BioNTech, que incluyen 200 millones este año, y el presidente francés Emmanuel Macron pidió a las empresas farmacéuticas que donen a países desfavorecidos el 10% de las dosis vendidas.
La presidencia británica del G7 también quiere pedir a los grandes laboratorios que proporcionen vacunas a precio de coste durante toda la pandemia, siguiendo el ejemplo de AstraZeneca/Oxford.
En mayo, Pfizer/BioNTech, Moderna y Johnson & Johnson se comprometieron a suministrar 3.500 millones de dosis a precio de coste o con descuento a los países más pobres en 2021 y 2022, incluyendo 1.300 millones este año.
Los líderes del G7 también debatirán el establecimiento de “mecanismos para prevenir futuras pandemias”.