Un soplo de polvo en pleno rostro, una pérdida de memoria y luego una cuenta bancaria vacía. Tal es la pesadilla padecida por los asiduos de Wan Chai, un barrio de Hong Kong conocido por su vida nocturna, y el más frecuentado por los turistas hasta la pandemia.
Stuart, un británico de 36 años, necesitó varios días para recordarlo todo. Sólo al hablar con otra víctima, comprendió lo que le había ocurrido.
Mientras conversaba con una mujer a la salida de un bar, se acercó a él un hombre, con una mirada determinada.
“Pensé que iba a golpearme, pero solo me sopló algo al rostro. Me reí. Pero eso es todo. No me acuerdo lo que pasó después”, relató el británico quien, como las demás víctimas, ha pedido el anonimato.
Al día siguiente, de su cuenta bancaria se habían sacado 80 mil dólares de Hong Kong (más de 200 mil pesos).
“Era una cuenta conjunta con mi mujer, y esperamos un bebé. La policía dijo que yo estaba simplemente borracho, pero ¿por qué habría vaciado esta cuenta?”, lamentó el británico, instalado en Hong Kong desde hace 18 meses.
¿Qué es el “aliento del diablo”, usado en Hong Kong?
Las víctimas han llamado a estos ataques como el “aliento del diablo“. El término designa a las escopolamina, un medicamento contra el mareo que afecta a la voluntad y puede provocar una pérdida de conciencia.
Varías víctimas en Hong Kong
Gerentes y clientes asiduos de bares de Wan Chai han creado grupos de WhatsApp dedicados a este tema. Desde hace meses, están llenos de historias similares.
La mayoría de las víctimas no tiene ningún recuerdo de lo ocurrido. Al despertar, sus cuentas han sido vaciadas por estafadores que, al drogar a sus víctimas, llegan a arrancarles fácilmente su código bancario secreto.
Según la policía y los propietarios de bar, suelen ser las profesionales del sexo las que drogan a sus víctimas, a veces con la complicidad de hombres.
“La pandemia ha sido difícil para todos nosotros, especialmente para las chicas”, afirmó un propietario de bar de Wan Chai.