Las autoridades filipinas han encontrado la caja negra del avión militar cuyo siniestro el pasado domingo en el sur del archipiélago causó 52 muertes, incluidos tres civiles, lo que puede ayudar a los investigadores a esclarecer las causas del accidente, informó este martes el Ejército a los medios locales.
“La encontraron ayer (el lunes) a las 11 de la mañana. La tienen los investigadores, están inspeccionándola y escuchando la última conversación entre el piloto y la tripulación”, declaró al periódico Inquirer, Cirilito Sobejana, jefe del Estado mayor de las Fuerzas Armadas de Filipinas.
Sobejana explicó que los investigadores siguen en el lugar del siniestro interrogando a los testigos para obtener más indicios sobre el siniestro ocurrido en la isla de Jolo, en el extremo sur del país.
Las autoridades elevaron anoche a 52 el número de víctimas, 49 de ellos militares, mientras que 51 personas, incluidos cuatro civiles, resultaron heridas y están recibiendo tratamiento.
La nave, un C-130 Hércules de cuatro motores, realizaba la maniobra de aterrizaje en un aeródromo de la isla de Jolo cuando se pasó de la pista y no pudo volver a tomar altura hasta estrellarse contra un campo cercano.
En el interior del aparato viajaban soldados que en su mayoría acababan de graduarse e iban a ser desplegados en un batallón que combate contra varios grupos extremistas islámicos que se refugian en el remoto archipiélago de Jolo, en el suroeste de Filipinas.
El accidente vuelve a poner en el punto de mira al vetusto y pobremente mantenido arsenal del Ejército filipino, que generalmente adquiere aviones y helicópteros de segunda e incluso de tercera mano.
El C-130 accidentado fue entregado a principios de año a Filipinas mediante el acuerdo de asistencia militar que mantiene con Estados Unidos, quien operó la nave entre 1988 y 2016 y que pasó los últimos años en un hangar de una base estadounidense.
A finales de junio, seis personas perdieron la vida al accidentarse un helicóptero S-70i Black Hawk durante una misión de entrenamiento cerca de la base militar aérea de Clark, en el norte de Manila.
En enero, un helicóptero UH-1H utilizado en la guerra de Vietnam y que posteriormente fue renovado sufrió un accidente durante una misión de abastecimiento en el sur del país y que se saldó con ocho soldados fallecidos.
El gobierno se comprometió en 2018 a destinar más de 6 mil millones de dólares para actualizar el desfasado arsenal del Ejército.