La vicepresidenta de Estados Unidos, Kamala Harris, confirmó este jueves que dos baterías de sistemas antimisiles Patriot han sido desplegadas en Polonia y anunció que su país entregará 50,000 mdd a Ucrania a través del Programa Mundial de Alimentos de las Naciones Unidas.
Harris dijo durante una visita oficial a Polonia que el envío de las baterías de misiles es una prueba del “compromiso” de Washington con ese país, al que ha llegado la mayoría de los refugiados que huyen de Ucrania por la guerra en ese país.
En Varsovia la vicepresidenta estadounidense abordó la situación en Ucrania con miembros del Gobierno polaco y recordó que Estados Unidos ha desplegado en Polonia 4,700 efectivos adicionales que se suman a los 5,000 que están estacionados allí de forma habitual.
En una rueda de prensa con el presidente polaco, Andrzej Duda, Harris reincidió en el compromiso de Washington con el Artículo 5 del Tratado de la OTAN, sobre la defensa mutua de sus miembros, y subrayó que se defenderá “cada pulgada de territorio” de la alianza.
“Hemos prestado apoyo militar, humanitario y de seguridad y éste es un proceso que está en curso,” declaró, rehusando entrar en detalles sobre la posibilidad de una eventual entrega de aviones de combate a Ucrania.
Esta semana, el Gobierno polaco había ofrecido intercambiar sus aeronaves MiG 29 a la OTAN para ponerlas a disposición de Ucrania a cambio de aviones estadounidenses, una propuesta que según Washington no había sido debatida antes de hacerse pública.
“Voy a ser muy clara, Estados Unidos y Polonia están unidos, en lo que hemos hecho y en lo que haremos para ayudar a Ucrania. Punto final,” dijo Harris al respecto.
Harris dijo por otro lado que el anuncio de la aportación de 50,000 mdd a Ucrania a través del Programa Mundial de Alimentos de la ONU se añade a la decisión de las últimas horas del Congreso estadounidense, que ha aprobado la concesión de otros 13,600 mdd que serán distribuidos en la región.
Con ello se pretende evitar una catástrofe humanitaria en Ucrania y apoyar a los países de la zona a la hora de acoger a los más de un millón y medio de refugiados que han abandonado hasta ahora el país, una cifra, según Harris “sin precedentes”.