Rusia dijo el miércoles que había realizado un lanzamiento de prueba de su misil balístico intercontinental Sarmat, una nueva adición a su arsenal nuclear que, según el presidente Vladimir Putin, hará reflexionar dos veces a los enemigos de Moscú.
A Putin se le mostró en la televisión cuando los militares le dijeron que el misil había sido lanzado desde Plesetsk, en el noroeste del país, y que había alcanzado objetivos en la península de Kamchatka, en el lejano oriente.
“El nuevo complejo tiene las características tácticas y técnicas más altas y es capaz de superar todos los medios modernos de defensa antimisiles. No tiene análogos en el mundo y no los tendrá durante mucho tiempo”, dijo Putin.
“Esta arma verdaderamente única fortalecerá el potencial de combate de nuestras fuerzas armadas, garantizará de forma fiable la seguridad de Rusia frente a amenazas externas y hará reflexionar dos veces a aquellos que, en medio de una retórica frenéticamente agresiva, intentan amenazar a nuestro país”.
El Sarmat es un nuevo misil balístico intercontinental pesado que se espera que Rusia despliegue con 10 o más ojivas en cada misil, según el Servicio de Investigación del Congreso de Estados Unidos.
Ha estado en desarrollo durante años, por lo que su lanzamiento de prueba no es una sorpresa para Occidente, pero llega en un momento de extrema tensión geopolítica debido a la guerra de Rusia en Ucrania.
El misil, que fue lanzado desde el cosmódromo de Plesetsk, alcanzó su destino a 6.000 kilómetros de distancia en el polígono de Kurá, en la península de Kamchatka, bañada por el Océano Pacífico.
El RS-28 Sarmat, o Satan-2, pesa más de 100 toneladas, y los medios vinculados al estado ruso afirmaron que tiene un alcance de 10.000 km, según The Independent.
Moscú dijo que el Satan-2 es capaz de destruir un área del tamaño de Texas.