Corea del Norte disparó la mañana del 5 de junio, ocho misiles balísticos de corto alcance hacia el mar frente a su costa oriental, un día después de que Corea del Sur y Estados Unidos concluyeron sus primeras maniobras militares combinadas con un portaaviones estadounidense en más de cuatro años.
Los misiles fueron disparados desde la zona de Sunan, en la capital norcoreana, Pyongyang, informó el Estado Mayor Conjunto de Corea del Sur.
La agencia de noticias japonesa Kyodo, citando una fuente gubernamental, también dijo que Corea del Norte había lanzado múltiples misiles.
El lanzamiento se produjo tras la visita a Seúl del representante especial de Estados Unidos para asuntos norcoreanos, Sung Kim, que partió el sábado.
El viernes se reunió con sus homólogos surcoreano y japonés, Kim Gunn y Takehiro Funakoshi, para prepararse para “todas las contingencias” en medio de los indicios de que Corea del Norte se preparaba para realizar una prueba nuclear por primera vez desde 2017.
Washington ha dejado muy claro directamente a Pyongyang que está abierto a la diplomacia, dijo Kim durante la visita, que concluyó el domingo, y señaló que estaba dispuesto a discutir temas de interés para Pyongyang, como el alivio de las sanciones.
La semana pasada, Estados Unidos pidió más sanciones de la ONU a Pyongyang por sus lanzamientos de misiles balísticos, pero China y Rusia vetaron la sugerencia, dividiendo públicamente al Consejo de Seguridad de la ONU sobre Corea del Norte por primera vez desde que empezó a imponer sanciones en 2006, cuando realizó su primera prueba nuclear.
En las últimas semanas, Corea del Norte ha realizado pruebas de lanzamiento de diversos misiles, incluido su mayor misil balístico intercontinental (ICBM).
Las pruebas más recientes de Corea del Norte tuvieron lugar el 25 de mayo, cuando lanzó tres misiles después de que el presidente de Estados Unidos, Joe Biden, finalizó un viaje por Asia en el que acordó nuevas medidas para disuadir a Pyongyang.
El primer misil parecía ser el mayor ICBM del Norte, el Hwasong-17, mientras que un segundo misil no especificado parecía haber fallado en pleno vuelo, dijeron entonces funcionarios surcoreanos. El tercer misil era un misil balístico de corto alcance (SRBM).
El sábado, buques surcoreanos y estadounidenses concluyeron tres días de ejercicios en aguas internacionales frente a la isla japonesa de Okinawa, incluyendo operaciones de defensa aérea, antibuque, antisubmarina y de interdicción marítima, dijo el Estado Mayor Conjunto de Corea del Sur.
Los ejercicios incluyeron al USS Ronald Reagan, un portaaviones de propulsión nuclear de 100,000 toneladas, entre otros buques de guerra importantes.
El presidente surcoreano Yoon Suk-yeol, que tomó posesión de su cargo el 10 de mayo, había acordado con Biden aumentar los ejercicios militares bilaterales para disuadir a Corea del Norte.
Corea del Norte ha criticado los anteriores simulacros conjuntos como ejemplo de las continuas “políticas hostiles” de Washington hacia Pyongyang, a pesar de su discurso de diplomacia.