La batalla judicial entre el multimillonario Elon Musk y Twitter escaló este viernes, luego de que el empresario acusara a la red social de “fraude” en el marco del acuerdo de compra alcanzado con la empresa por 44 mil millones de dólares, y del cual quiere retirarse.
En respuesta a una demanda de Twitter, que quiere obtener un fallo judicial que obligue a Musk a comprar la empresa, Musk presentó ante un tribunal especializado en negocios del estado de Delaware una acusación contra Twitter por haber falseado el número de cuentas monetizables (plausibles de generar ingresos).
Los abogados de Musk acusan ahora a Twitter de haber “enmascarado la verdad” sobre el número de usuarios cotidianos monetizables, que la red social calcula en 238 millones.
Según los representantes legales de Musk, son unos 65 millones menos, y la mayoría de los anuncios publicitarios solo son difundidos a menos de 16 millones de usuarios, una fracción de lo que Twitter informa.
“Twitter impidió frenéticamente a la información de circular en una tentativa desesperada de evitar que Elon Musk descubriera el fraude”, señala la querella.
A mediados de julio, Twitter llevó a Musk ante la Delaware Court of Chancery, un tribunal especializado en derecho empresarial, en busca de obligarle a cumplir el trato. El proceso comenzará el 17 de octubre.
Dos semanas después, el multimillonario jefe de Tesla y SpaceX contraatacó con una querella “confidencial”.
Musk firmó un acuerdo de compra por 54.20 dólares por acción, luego de ingresar en el capital de Twitter, una red social de la cual es frecuente usuario.
A fines de julio puso fin unilateralmente a este entendimiento, argumentando que la firma con sede en San Francisco mintió sobre la proporción de cuentas automáticas y spams en su plataforma.
Diferencias
Musk acusa al directorio de Twitter de haber escondido la verdadera proporción de cuentas falsas, que la red social estima en menos de 5% de las existentes.
“Los documentos oficiales presentados ante las autoridades bursátiles estadounidenses (SEC) por la plataforma contienen numerosas declaraciones falsas y omisiones que falsean el valor de Twitter y llevaron a Elon Musk a aceptar comprar la empresa a un precio inflado”, aseguran ahora sus abogados.
La estrategia de Twitter, dijeron, consistió en “jugar a las escondidas” para impedir por el mayor tiempo posible al comprador de “descubrir la verdad”.
Twitter señala que el empresario impulsó las negociaciones y que el acuerdo jamás mencionó las cuentas falsas. Sus abogados denuncian un “intento de escapar a un contrato que Musk ya no encuentra interesante desde que el mercado de acciones bajó”.
En medio de un debilitamiento general del mercado en los últimos meses, la caída de los ingresos publicitarios de las redes sociales por la coyuntura económica y las críticas públicas de Musk, las acciones de Twitter cayeron a unos 32 dólares el 11 de julio.
Este viernes valían 41.97 dólares en Wall Street, en alza de 2.20%. En cambio, las acciones de Tesla perdían 6.05%, a 869.92 dólares.