El primer ministro canadiense, Justin Trudeau, se declaró sorprendido de que compañías con licencia para vender cocaína a farmacias y hospitales daban a entender que pronto Canadá permitiría la venta de drogas duras al público.
A comienzos de semana, varias compañías anunciaron que la agencia de salud canadiense les había permitido producir y vender cocaína.
El anuncio se dio un mes después de que la provincia de Columbia Británica lanzara un proceso de despenalización experimental para abordar la crisis de sobredosis por opioides que ha matado a miles de ciudadanos.
La provincia despenalizó la posesión, pero no la venta, de pequeñas cantidades de cocaína y otras drogas duras, en el marco de un proyecto piloto de tres años, apuntando a eliminar el estigma asociado al uso de drogas que les impide a los adictos el acceso a ayuda.
Defensores de la iniciativa también han exigido que los suministros sean más accesibles y seguros para los adictos a las drogas, quienes están en riesgo de sobredosis por la venta callejera ilícita.
Trudeau aclaró que las compañías no tenían permiso para venderlas comercialmente o distribuirlas en un mercado abierto, y añadió que el malentendido será corregido.
"Hay permisos limitados y muy restringidos para ciertas compañías farmacéuticas para usar la sustancia con fines de investigación y para propósitos médicos específicos cuidadosamente prescritos", explicó.
Trudeau comentó sobre el tema luego de que David Eby, primer ministro de Columbia Británica, expresara su sorpresa por las afirmaciones de Sunshine Earth Labs y Adastra Labs.
"Estaba tan sorprendido como el primer ministro de Columbia Británica al ver que una compañía estaba hablando de vender cocaína en el mercado abierto o de comercializarla al público", dijo Trudeau a los periodistas.
Horas antes, Eby declaró en conferencia de prensa que no sabía nada sobre los anuncios hechos por las empresas, puesto que no forma parte del plan de la provincia, en la que se permite la posesión de hasta 2.5 gramos de drogas duras, como cocaína o heroína, sin que esto sea considerado un delito.