Japón desplegó varios aviones de combate tras detectar la presencia de dos cazas rusos en su espacio aéreo. Un suceso que tuvo lugar horas después de que las autoridades niponas autorizaran el envío de ayuda militar a Ucrania.
Fue el Estado Mayor Conjunto quien informó de la decisión adoptada, después de que las aeronaves rusas se dirigieran hacia el Océano Pacífico a través del mar de Ojotsk. “Respondimos con aviones combate de la Fuerza de Defensa Aérea del Norte”, explicaron. De hecho, Japón no es el único país que toma una decisión de este calibre. Meses atrás, ya lo hicieron cazas de la OTAN cuando avistaron aviones de combate rusos en la frontera entre Polonia y Ucrania.
Japón, en sintonía con los aliados de la Alianza Atlántica, confirmó este miércoles el suministro de vehículos militares a Ucrania, así como un paquete de ayuda militar por un valor de 436 millones de euros, y material no letal a través de fondos de la OTAN. Fue en marzo cuando el Primer Ministro del país del sol naciente, Fumio Kishida, solicitó al Parlamento un cambio en la normativa de exportación de material letal por primera vez en el conflicto.
El jefe del Ejecutivo japonés también prometió meses atrás una partida de 5.500 millones de dólares adicionales para Kiev, expresando la “fuerte preocupación de que Ucrania pueda ser el Asia del Este del mañana”. Sin embargo, este conflicto no es el único que Japón y Rusia mantienen a día de hoy. La soberanía sobre las Islas Kuriles todavía enfrenta a Tokio y a Moscú.
Islas Kuriles, la eterna disputa ruso-nipona
También llamados Territorios del Norte, es un archipiélago compuesto por varios grupos de islas (Iturup, Kunashir, Shikotan y Habomai). Es la primera vez en dos décadas, el país del sol naciente cambió de postura sobre el asunto y habló abiertamente de ocupación. En ellas habitan escasos ciudadanos japoneses, aunque fueron ocupadas por las tropas soviéticas en la Segunda Guerra Mundial.
Las palabras que fueron emitidas desde Tokio supusieron un cambio de tendencia en las relaciones diplomáticas de ambos países. El Ministerio de Exteriores nipón ha indicado la “gran preocupación entre Japón y Rusia respecto a estos territorios, sobre los que Japón tiene derechos soberanos”. Pero desde el Kremlin se tiene una visión totalmente opuesta.