El ministro de Defensa de Rusia, Serguéi Shoigú, afirmó este martes que en caso del suministro de bombas de racimo estadounidenses a Ucrania, Moscú "utilizará medios de destrucción similares".
"Si Estados Unidos suministra bombas de racimo a Ucrania, las Fuerzas Armadas rusas se verán obligadas a utilizar armas similares contra las fuerzas ucranianas", dijo Shoigú en declaraciones transmitidas por la televisión rusa.
Shoigú recordó que ni Rusia, ni EEUU, ni Ucrania se han sumado a la Convención sobre Municiones de Racimo, pero aseguró que Moscú, "siendo consciente de la amenaza que representa esta munición para la población civil, se ha abstenido y se abstiene de usarlas" en el curso de su campaña bélica en Ucrania.
Con todo, según el ministro ruso, Moscú tiene en reserva suficiente munición de racimo, que es "mucho más eficaz" y diversa que los análogos estadounidenses.
Además, el complejo industrial-militar de Rusia ha multiplicado la producción de diversas armas y otros equipos para el Ejército desde 2022, aseguró.
En este sentido, insistió en que el suministro de bombas de racimo a Kiev solo "alargará el conflicto" en Ucrania.
El secretario general de la OTAN, Jens Stoltenberg, afirmó este martes que Ucrania "se está quedando sin munición" y que hay que hacer "todo lo posible por suministrársela", si bien la decisión de entregarle las controvertidas bombas de racimo es una decisión individual de cada país.