Corea del Norte lanzó el miércoles su primer misil balístico intercontinental en tres meses, dos días después de amenazar con consecuencias "rotundas" para protestar contra lo que, señaló, era actividad de reconocimiento provocadora cerca de su territorio por parte de Estados Unidos.
Algunos expertos dijeron que probablemente se trataba de un misil Hwasong-18, un modelo en desarrollo y que puede trasladarse por carretera. Utiliza combustible sólido y es más difícil de detectar e interceptar que los MBIC de combustible sólido que tiene Pyongyang. El líder norcoreano, Kim Jon Un, ha descrito el Hwasong-18 como su arma nuclear más poderosa.
El misil salió de la región de la capital norcoreana en torno a las 10:00 y recorrió unos mil kilómetros a una altitud máxima de 6 mil kilómetros antes de caer en el mar entre la Península de Corea y Japón, según reportes surcoreanos y japoneses. El proyectil se lanzó con un ángulo elevado en un aparente intento de evitar a los países vecinos, señalaron.
El ejército surcoreano tachó el lanzamiento de "grave provocación" e instó a Corea del Norte a evitar nuevos ensayos. El secretario del gobierno japonés, Hirokazu Matsuno, denunció los reiterados lanzamientos de misiles de Corea del Norte como "amenazas a la paz y la seguridad de Japón, la región y la sociedad internacional".
En una llamada trilateral, los responsables nucleares de Corea del Sur, Japón y Estados Unidos acordaron lidiar con dureza con las provocaciones norcoreanas y estrechar su coordinación para impulsar una respuesta internacional más firme a los programas nuclear y de misiles de Pyongyang, según el Ministerio surcoreano de Exteriores.
El lanzamiento se produjo mientras el presidente de Corea del Sur, Yoon Suk Yeol, y el primer ministro de Japón, Fumio Kishida, asistían a la cumbre de la OTAN en Vilna, Lituania. En una reunión de emergencia del consejo de seguridad surcoreano a la que asistió por videoconferencia, Yoon advirtió que Corea del Norte enfrentaría sanciones internacionales más duras debido a sus programas armamentísticos ilícitos.
El programa de misiles de largo alcance de Corea del Norte tiene como objetivo el territorio continental de Estados Unidos. Desde 2017, Corea del Norte ha llevado a cabo numerosos lanzamientos de misiles balísticos intercontinentales como parte de sus esfuerzos para desarrollar armas nucleares capaces de atacar algunas de las ciudades más importantes de Estados Unidos. Algunos expertos señalaron que Corea del Norte aún debe dominar algunas tecnologías para poseer misiles balísticos intercontinentales funcionales con armas nucleares.
Antes del lanzamiento del miércoles, la prueba más reciente de misiles de largo alcance de Corea del Norte se había llevado a cabo en abril, cuando lanzó otro misil balístico intercontinental de combustible sólido.
El lanzamiento del miércoles, el primero que realiza Corea del Norte en un mes, se produjo luego de que Pyongyang hizo varias declaraciones en las que acusó a Estados Unidos de enviar un avión militar cerca de Corea del Norte para espiarlo.
Estados Unidos y Corea del Sur rechazaron las acusaciones de Corea del Norte y la exhortaron a abstenerse de cualquier acto o retórica que aumente las hostilidades.