La Organización de las Naciones Unidas (ONU) se ha pronunciado sobre la suspensión del acuerdo del grano por parte de Rusia, expresando su preocupación por las consecuencias que esto tendrá en las personas necesitadas en todo el mundo.
El secretario general de la ONU, António Guterres, lamentó la decisión rusa de abandonar los acuerdos del mar Negro, que permitían la exportación de cereales ucranianos. En un intento por mantener viva esta iniciativa, Guterres envió propuestas al presidente ruso, Vladímir Putin, pero lamentablemente fueron ignoradas.
Guterres enfatizó que esta elección de Rusia tendrá un impacto significativo en los países en desarrollo y en millones de personas que sufren de hambre. Además, advirtió sobre una posible crisis global del costo de la vida, ya que los acuerdos del mar Negro habían contribuido a estabilizar los mercados y facilitar la exportación de productos alimentarios desde puertos ucranianos.
A pesar de la decisión del Kremlin, la ONU continuará sus esfuerzos para facilitar el acceso sin obstáculos a los mercados globales para los productos y fertilizantes tanto de Ucrania como de Rusia. El objetivo sigue siendo mejorar la seguridad alimentaria global y la estabilidad de los precios.
Rusia argumentó que las sanciones impuestas debido a la invasión de Ucrania les impiden cumplir con la parte del acuerdo que garantiza las exportaciones de alimentos y fertilizantes rusos. Según el portavoz del Kremlin, Dmitri Peskov, la parte del acuerdo que se refiere a Rusia no se ha cumplido, lo que llevó a la expiración del acuerdo.
En respuesta a esto, Guterres citó partes de la carta que envió a Putin, destacando los altos niveles de venta de grano ruso logrados y la estabilización de los mercados de fertilizantes. También mencionó que la ONU ayudó a que Estados Unidos, el Reino Unido y la Unión Europea aclararan o modificaran sus sanciones para facilitar las exportaciones agropecuarias rusas, que no estaban cubiertas por esos castigos pero que se vieron afectadas indirectamente.
Además, se ha establecido un canal de pagos específico para el banco agrícola ruso, Rosseljozbank, al margen de SWIFT. Recientemente, se aprobó una propuesta para permitir que una filial del banco recupere el acceso a ese sistema de transacciones financieras, respondiendo a la solicitud de Rusia.