El Departamento de Justicia de Estados Unidos ha notificado al estado de Texas sobre su intención de presentar una acción legal contra la instalación del denominado "muro" flotante en el Río Bravo, como parte de las operaciones fronterizas de Texas con México.
La carta enviada al gobernador de Texas, Greg Abbott, advierte que las acciones del estado violan la ley federal, plantean preocupaciones humanitarias, riesgos para la seguridad pública y el medio ambiente, y pueden interferir con las funciones del gobierno federal.
La misiva hace referencia a una cláusula de la ley que prohíbe cualquier obstrucción a la capacidad navegable de las aguas de Estados Unidos y la construcción de estructuras en dichas aguas sin autorización del Cuerpo de Ingenieros del Ejército estadounidense.
Cabe mencionar que esta notificación no afecta a la evaluación en curso sobre el maltrato a los migrantes, que el Departamento de Justicia ha calificado como "informes preocupantes".
El gobernador Abbott ha afirmado en Twitter que Texas tiene la autoridad soberana para defender su frontera, según la Constitución del país y la Constitución de Texas, y ha enviado varias cartas a la administración Biden detallando su autoridad al respecto