Una equipo del FBI (Agencia Federal de Investigación) de los Estados Unidos está en camino a Ecuador y se espera que lleguen en las próximas horas para brindar su respaldo en la pesquisa del homicidio de Fernando Villavicencio, aspirante presidencial. Villavicencio fue víctima de un ataque perpetrado por individuos presuntamente contratados para matar, poco después de un mitin político en Quito el miércoles por la tarde.
El presidente de Ecuador, Guillermo Lasso, anunció en las redes sociales el jueves que había solicitado apoyo del FBI en la investigación para esclarecer el crimen.
El Gobierno de los Estados Unidos había ofrecido ayuda inmediata en la investigación tras conocerse el asesinato de Villavicencio. El embajador de EE. UU. en Quito, Michael J. Fitzpatrick, coordinó esta oferta con las autoridades ecuatorianas.
La colaboración del FBI en este caso se encuentra en línea con la estrecha relación que han desarrollado los Estados Unidos y Ecuador en los últimos dos años. Esta cooperación ha crecido, especialmente después de la asunción de Guillermo Lasso al poder, abarcando diversos aspectos, incluyendo la seguridad.
Hasta el momento, se ha informado que múltiples individuos, posiblemente sicarios, participaron en el asesinato de Villavicencio. Se ha detenido a seis extranjeros bajo sospecha de estar involucrados en el crimen.
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Uno de los supuestos responsables falleció a causa de las heridas sufridas durante un tiroteo con el equipo de seguridad que protegía al candidato. Se desconoce si alguna de las bandas de crimen organizado que operan en Ecuador está detrás de este ataque mortal, que dejó al menos nueve heridos, incluyendo a tres policías.
Durante la campaña electoral, centrada principalmente en la crisis de seguridad en Ecuador, él había expresado su compromiso de enfrentar directamente a estas bandas y había denunciado amenazas de muerte en su contra en las semanas previas.
En los últimos dos años, los asesinatos a manos de sicarios y los actos violentos perpetrados por grupos armados han aumentado en Ecuador. El Gobierno atribuye esto en gran medida al crimen organizado, que ha fortalecido su presencia en la región costera. Utilizan los puertos ecuatorianos para transportar cocaína hacia Europa y Norteamérica.
Villavicencio era uno de los ocho candidatos presidenciales inscritos en estas elecciones extraordinarias, convocada para el domingo 20 de agosto, luego de que Lasso decretase la “muerte cruzada”, un mecanismo constitucional con el que disolvió la Asamblea Nacional (Parlamento), de mayoría opositora, cuando se disponía a votar su destitución.
