Según el último informe publicado por el Departamento de Salud de la ciudad, el fentanilo se ha convertido en el principal protagonista de una alarmante crisis de sobredosis en Nueva York.
El reporte revela que en 2022, el fentanilo estuvo detrás del 81% de las muertes por sobredosis en la Gran Manzana, marcando un aumento del 12% en comparación con el año anterior.
Estas cifras representan un sombrío récord desde que comenzaron a registrarse estos datos en el año 2000, con un total de 3,026 fallecimientos en la ciudad de Nueva York.
El informe también pone de manifiesto que la carga de la crisis de sobredosis recae de manera desproporcionada en ciertas comunidades. Los afroamericanos experimentaron la tasa de mortalidad más elevada y el mayor aumento absoluto en el período de 2021 a 2022, con un salto del 52.0 al 62.0 por cada 100,000 residentes. Los latinos ocuparon el segundo lugar, con una tasa de 53.1 por cada 100,000 habitantes del condado.
Además, el análisis demográfico revela que, como en años anteriores, los adultos de entre 55 y 64 años tuvieron la tasa más alta de sobredosis, seguidos de cerca por aquellos en el rango de edad de 45 a 54 años.
El Bronx, el condado con la población predominantemente latina y considerado el más desfavorecido de la ciudad, reportó la tasa de mortalidad más alta en 2022, alcanzando los 73.6 fallecimientos por cada 100,000 residentes.
Los datos del Departamento de Salud indican, además, que la tasa de sobredosis entre residentes de vecindarios de alta pobreza aumentó un 21%, y pasó de 32.4 por 100,000 en 2021 a 39.3 por 100,000 habitantes en 2022.
En el 2022, los residentes de vecindarios de muy alta pobreza tuvieron la tasa más alta de muertes por sobredosis, de 72.8 por 100,000 en comparación con 21.8 por 100,000 en barrios de baja pobreza.
“Las muertes por sobredosis alcanzaron niveles sin precedentes en la ciudad en 2022. Las desigualdades en muertes por raza/etnia, edad, ingresos y vecindario se han ampliado a medida que ha empeorado la magnitud de la crisis de sobredosis”, indica el informe de Salud.
Apunta, así mismo, que el acceso desigual a los recursos necesarios para la salud y el bienestar es producto del racismo estructural y la desinversión a largo plazo en las comunidades.
El comisionado de Salud, Ashwin Vasan, advirtió que la crisis de opioides está matando a un neoyorquino cada tres horas y que se pueden tomar varias medidas como llevar consigo naloxona para revertir la sobredosis, recibir capacitación para utilizarla y reconocer los signos de la sobredosis.
También advirtió que nadie debe consumir ni permitir que nadie consuma drogas solo y si lo hace, debe buscar atención, apoyo y tratamiento.
Además exhortó a los neoyorquinos a tener una conversación “sincera y sin prejuicios” sobre las drogas y sus riesgos.