Un sismo de magnitud 6.3 sacudió el oeste de Afganistán el sábado, dejando una estela de destrucción y causando la muerte de al menos 120 personas, con más de mil heridos, según las autoridades locales.
El Servicio Geológico de Estados Unidos (USGS) informó que el epicentro del sismo se ubicó a 40 kilómetros al noroeste de la ciudad de Herat, en la provincia del mismo nombre. El sismo, que tuvo lugar a las 11:00 (06:30 GMT), provocó el pánico en la población, que rápidamente abandonó los edificios en busca de seguridad.
"Por el momento figuran en nuestros registros más de mil mujeres, niños y ancianos heridos, y unas 120 personas han perdido la vida", declaró a Afp Mosa Ashari, director de gestión de catástrofes de la provincia de Herat.
Las réplicas no se hicieron esperar, con siete temblores posteriores de magnitudes entre 4.6 y 6.3, manteniendo a la población en alerta constante.
La población buscó refugiarse en calles anchas, lejos de edificios altos después del primer sismo y ante las réplicas, muchos habitantes fueron cautelosos antes de volver a sus viviendas.
Las autoridades locales advierten que el balance de víctimas mortales podría aumentar significativamente en las próximas horas.
"Hay algunas áreas que están totalmente colapsadas y todas las casas están dañadas", informó Mullah Jan Sayeq, portavoz de la Autoridad Nacional de Gestión de Desastres. "Todavía hay personas enterradas bajo los escombros", agregó.
El USGS emitió un informe preliminar en el que advierte sobre la posibilidad de cientos de víctimas mortales adicionales. "Es probable que haya un número importante de víctimas, y que la catástrofe sea potencialmente extensa", indicó el instituto estadounidense.
Herat, ubicada a 120 kilómetros al este de la frontera con Irán, es la capital de la provincia homónima, con una población de cerca de 1.9 millones de personas según datos del Banco Mundial de 2019.