El gobierno de Estados Unidos ha asegurado que no desplegará fuerzas militares en el terreno después de los recientes ataques perpetrados por el grupo militante islamista Hamas contra Israel.
No obstante, se compromete a proteger enérgicamente los intereses estadounidenses en la región, según declaraciones de un portavoz de la Casa Blanca.
John Kirby, portavoz del Consejo de Seguridad Nacional de la Casa Blanca, subrayó la preocupación sobre la posible complicidad de Irán en el respaldo a Hamas, aunque hasta el momento no han surgido pruebas concluyentes que vinculen directamente a Irán con los ataques.
En una conferencia de prensa, Kirby afirmó que el gobierno del presidente Joe Biden está dispuesto a responder a las solicitudes adicionales de seguridad que pueda realizar Israel, con el objetivo de garantizar la estabilidad en la región.
Acerca de las relaciones en Medio Oriente, Kirby expresó que "es demasiado pronto para afirmar que hemos frenado los esfuerzos para normalizar las relaciones entre Arabia Saudita e Israel", enfatizando que la diplomacia sigue siendo esencial para fomentar una mayor colaboración entre las naciones en la región.