En el marco de la reanudación de la 10ª sesión especial de emergencia de la Asamblea General de la ONU, que tuvo lugar el pasado 26 de octubre, la embajadora Alicia Buenrostro, encargada de Negocios en la Representación Permanente de México, hizo un llamado enérgico a Hamas para que libere de manera inmediata y sin condiciones a los rehenes que están bajo su custodia, incluyendo a dos ciudadanos mexicanos.
Además, la embajadora expresó su preocupación por el impacto de la respuesta israelí a los ataques de Hamas, que ha resultado en un alto número de víctimas y daños a la infraestructura civil en Palestina.
En un comunicado emitido por la Secretaría de Relaciones Exteriores (SRE) hoy, se informó que la embajadora Buenrostro también instó al cese inmediato y sostenido de las hostilidades en los territorios palestinos ocupados, particularmente los ataques contra civiles, y pidió la creación de un corredor humanitario y el levantamiento del estado de sitio que afecta a la población palestina, subrayando que las represalias son contrarias al derecho internacional.
📄 México llama en la ONU al cese inmediato de hostilidades en territorios palestinos ocupados y exige la liberación inmediata de los rehenes.https://t.co/yLNtUDOBs5 pic.twitter.com/3lybxGbqgo
— Relaciones Exteriores (@SRE_mx) November 1, 2023
Además, la embajadora calificó como inaceptable el uso del veto para bloquear la acción del Consejo de Seguridad de la ONU en esta situación crítica. Mencionó específicamente los vetos ejercidos por Estados Unidos, Rusia y China en proyectos de resolución relacionados con el conflicto.
La Asamblea General de la ONU adoptó una resolución presentada por Jordania, en su calidad de presidente del Grupo Árabe, que busca la protección de civiles y el cumplimiento de las obligaciones legales y humanitarias en la región. La resolución recibió un amplio apoyo, con 120 votos a favor, incluyendo el de México.
La cancillería de México reiteró su apoyo a una solución política integral y definitiva del conflicto en la región, basada en la idea de dos Estados, que tenga en cuenta las legítimas preocupaciones de seguridad de Israel y permita la creación de un Estado de Palestina viable políticamente y económicamente, coexistiendo con Israel en fronteras seguras e internacionalmente reconocidas, de acuerdo con las resoluciones relevantes de la ONU.