En medio de la creciente violencia desatada por el conflicto entre el grupo islamista Hamás e Israel desde el pasado 7 de octubre, un grupo de judíos ingresó el miércoles a la Explanada de las Mezquitas, también conocida como el Monte del Templo por la comunidad judía, en la Ciudad Vieja de Jerusalén.
A pesar de la presencia de un robusto dispositivo policial, la incursión de los judíos en esta zona ha sido ampliamente criticada en el pasado por las autoridades palestinas y se considera una provocación. Según informes de la agencia de noticias palestina WAFA, los judíos llevaron a cabo rituales talmúdicos en el lugar sagrado.
El 'status quo' en la Explanada de las Mezquitas prohíbe a los judíos rezar en el lugar y solo les permite visitarlo en horarios específicos y siguiendo rutas designadas, bajo la supervisión de la policía para evitar cualquier acto religioso o la introducción de banderas israelíes u objetos religiosos.
La Explanada de las Mezquitas se encuentra adyacente al Muro de las Lamentaciones, que es el último vestigio del Templo de Salomón judío. Esto ha generado temores entre los musulmanes de que Israel busque destruir la Mezquita de Al Aqsa, el tercer lugar más sagrado del islam, con el fin de construir un Tercer Templo judío en Jerusalén.
Mezquita Al Aqsa en la Explanada de las Mezquitas, Jerusalén | Foto: Reuters
Este mismo miércoles, las autoridades palestinas informaron que al menos 55 personas fueron detenidas a manos del Ejército de Israel en varias zonas de Cisjordania: 16 en Hebrón, 11 en Belén, 10 en Qalquilia, siete en Nablús, dos en Yenin y otras dos en Jerusalén. A estos arrestos se suman dos detenidos en Ramala, tres en Tulkram.
El número total de detenidos en Cisjordania desde el pasado 7 de octubre, cuando tuvo lugar la ofensiva de Hamás contra territorio israelí, asciende a dos mil 280, según fuentes palestinas.
El Ejército de Israel confirmó que entre los arrestados se encontraban una decena de presuntos miembros de Hamás y que se llevaron a cabo operaciones en las que se incautaron materiales de Hamás en una universidad de Birzeit.
La violencia protagonizada por colonos israelíes en Cisjordania ha aumentado desde el inicio del conflicto entre Israel y Hamás. António Guterres, Secretario General de las Naciones Unidas, condenó enérgicamente los actos de los colonos israelíes contra la población palestina en la zona y ha instado a Israel a garantizar la protección de los civiles y a exigir responsabilidades.
En un incidente adicional el mismo miércoles, un grupo de colonos valló tierras en Uadi al Fau, en la gobernación de Tubas, al norte de Cisjordania, como parte de las continuas operaciones para apoderarse de más territorio destinado al pastoreo.