La Administración Federal de Aviación (FAA) de Estados Unidos ha establecido requisitos adicionales para Boeing antes de que sus aviones 737 MAX 9 regresen a la operación, en respuesta al reciente accidente aéreo.
La FAA exige que Boeing proporcione datos suplementarios antes de aprobar los procedimientos de inspección y mantenimiento necesarios para la reanudación de los vuelos, según un comunicado emitido el viernes por la noche.
La agencia busca revisar los datos obtenidos de una primera serie de controles de las puertas de los enchufes en 40 aviones, siguiendo las indicaciones de Boeing. Esta revisión determinará si las medidas propuestas son adecuadas para toda la flota de aviones actualmente en tierra.
“Estamos trabajando para asegurarnos de que nada como esto vuelva a suceder”, dijo el administrador de la FAA, Mike Whitaker, en el comunicado. “Nuestra única preocupación es la seguridad de los viajeros estadounidenses y el Boeing 737-9 MAX no volverá a los cielos hasta que estemos completamente satisfechos de que es seguro”.
Boeing aún no ha respondido a las solicitudes de comentarios realizadas después del horario comercial normal.
Esta decisión refleja la creciente crisis de confianza que envuelve a Boeing después de que un MAX 9 operado por Alaska Airlines sufriera un incidente en Oregon la semana pasada, donde el panel del fuselaje explotó poco después del despegue. Aunque no hubo heridos graves, el suceso ha agravado los problemas de calidad de Boeing y ha intensificado el escrutinio sobre sus procesos de fabricación.
La revisión adicional plantea la posibilidad de una prolongación en la inmovilización de la flota de aviones por casi una semana.
Las inspecciones preliminares realizadas por United Airlines y Alaska Airlines han revelado pernos sueltos en algunos de sus aviones MAX 9. La FAA inició una investigación formal de las operaciones de fabricación de Boeing el jueves y anunció medidas para fortalecer la supervisión del fabricante de aviones este viernes.
Mientras tanto, las aerolíneas que operan el MAX 9 aún esperan la aprobación de la FAA para realizar las inspecciones necesarias y reanudar los vuelos.
Varias aerolíneas, incluida United, el principal operador de Max 9 en EE. UU., han cancelado cientos de vuelos esta semana debido a la indisponibilidad de los aviones. Alaska Airlines, por su parte, informó que cancelará todos los vuelos programados en el avión hasta el 14 de enero.