Este martes, una intensa ola de frío y nevadas persistentes continúa afectando a gran parte de Estados Unidos, generando caos en la movilidad y provocando la cancelación de centenares de vuelos en el país.
El Servicio Meteorológico Nacional (NWS) detalló en un comunicado que la caída de nieve persiste en el Atlántico norte y en el noreste del país, mientras que se anticipan lluvias heladas en la costa noroeste del Pacífico.
Nueva Inglaterra enfrentará nevadas fuertes a lo largo del martes, mientras que algunas regiones del estado de Nueva York experimentarán nevadas moderadas.
En Washington D.C., las oficinas del Gobierno federal y las escuelas permanecerán cerradas durante el día debido a la acumulación de nieve.
Aunque el Servicio Meteorológico prevé una moderación en el clima durante hoy miércoles, la Agencia Federal para el Manejo de Emergencias (FEMA) aún no ha recibido solicitudes de ayuda por parte de autoridades locales, según su portavoz, Daniel Llargués.
Sin embargo, Llargués señaló que es probable que en las próximas horas lleguen peticiones, dado que la tormenta ha tenido un impacto significativo en diversas partes del país.
Los termómetros registrarán temperaturas extremadamente frías, descendiendo por debajo de los -30 grados en áreas de las Montañas Rocosas, las Grandes Llanuras y el Medio Oeste de Estados Unidos.
Con al menos 1,385 vuelos cancelados este martes y un total de 3,340 cancelaciones el lunes, la situación en los aeropuertos estadounidenses se ha visto gravemente afectada por la ola de frío, según el portal Flight Aware.
En Texas, la mayor compañía energética, ERCOT, emitió un llamamiento urgente a ciudadanos y empresas para que ahorren energía, dada la demanda récord y las temperaturas bajo cero. Llargués respaldó estas recomendaciones y destacó la importancia de contar con un "kit de emergencia" que incluya alimentos, agua embotellada, documentos y medicamentos para hacer frente a condiciones meteorológicas imprevistas.
A pesar de la moderación prevista para hoy miércoles, se pronostica que una nueva ola de aire ártico afectará al país a finales de la semana. Llargués subrayó la necesidad de tener "un plan de contingencia" ante las condiciones climáticas adversas.
La ola de frío, que ha azotado a Estados Unidos desde la semana pasada, ya ha dejado al menos siete personas fallecidas en los estados de Arkansas, Misisipi, Tennessee y Oregón, según informes de CNN. Los caucus de Iowa del lunes, que marcaron el inicio de las primarias republicanas, fueron los más fríos de la historia, con temperaturas de 30 grados bajo cero.