En una declaración emitida este viernes, el Primer Ministro israelí, Benjamin Netanyahu, anunció que dio instrucciones al ejército para que inicie la preparación de la evacuación de la ciudad de Rafá, ubicada en el sur de la franja y considerada como el último refugio de la población palestina desplazada por la reciente serie de bombardeos israelíes.
La decisión del Primer Ministro se basa en la consideración de que la derrota del movimiento palestino Hamas no puede lograrse sin abordar las fuerzas presentes en Rafá y sus alrededores.
"Es imposible alcanzar el objetivo de guerra de eliminar a Hamas y, al mismo tiempo, dejar cuatro batallones de Hamás en Rafá. Está claro que una operación masiva en Rafá necesita de la evacuación de la población civil de las zonas de combate", en referencia a una zona donde hay al menos 1,3 millones de personas bajo refugio.
El comunicado concluye que Netanyahu "ha ordenado al ejército y al estamento de seguridad que presenten al gabinete de guerra un plan combinado para evacuar a la población y destruir estos batallones".
La medida refleja la determinación de Israel en la consecución de sus objetivos estratégicos en medio de la creciente tensión en la región.