Un niño de doce años causó la muerte a tiros de un compañero de clase en una escuela de la ciudad de Vantaa, en el norte de Helsinki. Además, dejó gravemente heridos a otros dos niños antes de ser detenido.
La policía llegó al lugar alrededor de las 09 horas hora local (06 horas GMT) tras el incidente que involucró a unos 800 alumnos de entre 7 y 15 años, distribuidos en dos sitios diferentes. El arresto del sospechoso se efectuó alrededor de las 10 horas en Helsinki.
El sospechoso, quien portaba un arma de fuego y asistía al mismo colegio, fue detenido sin incidentes. El arma pertenece a un familiar del autor de los disparos, desencadenando una investigación por asesinato e intento de asesinato.
Dado que el joven es menor de 15 años, no enfrentará prisión ni cargos penales, según lo confirmó Markku Särkkä, portavoz policial. Sin embargo, ha sido interrogado y será entregado a los servicios sociales.
La Ministra del Interior anunció que las banderas en todo el país estarán a media asta el miércoles como muestra de duelo. Las autoridades continúan investigando el motivo detrás de este trágico acto mientras la comunidad se une en solidaridad y conmoción ante esta lamentable tragedia.
Esta tragedia rememora episodios oscuros en la historia de Finlandia, como los tiroteos en escuelas de Jokela y Kauhajoki a principios de la década de 2000, resaltando la necesidad continua de abordar y prevenir la violencia en entornos educativos.